Adicta a él.

Lo miro, y sonrio. Pienso que esto puede ser el comienzo de una bonita historia o solo el comienzo de una etapa la cual acabara en unos simples meses. No quiero pensar más, cierro los ojos y me sumerjo en el, en sus ojos, en su cuerpo, en sus labios, en nuestro amor. No quiero pensar en nada, solo recordar en todos los momentos vividos, pero sin querer me vienen a la mente los malos momentos, esos dias en lo que lloraba, sin saber muy bien el porque lo hacia, porque sabia perfectamente que llorando no se iba a arreglar nada, la única opción que me quedaba era olvidarle. Tanto daño producido, y tantas veces he llegado a pensar que lo mejor era olvidarle, pasar de hoja, pero que pocas veces he hecho caso a lo que me decia mi cabeza y las pocas que las he hecho, he fracasado. Mil peleas que acababan con lo mismo, dandonos un tiempo, pero ese tiempo no era muy largo, porque sabia como arreglarlo y yo siempre acababa convencida.